

El comentario del anciano es estremecedor como la vida de tantos y tantos que habrá como el Sr. Enrique, sin familia, sin techo, etc. Sin querer a veces y otras queriendo hemos implantado un modo de vida donde lo material está teniendo cada día más importancia, dejando atrás el lado humano.Esto hace que día a día se conviva más con máquinas, que con los propios amigos, vecinos o familiares, llevándonos a observar casos como los del amigo Enrique. De ahí el dicho: “tanto tienes, tanto vales”.
Hablando de la importancia que le doy a la historia del cámara de televisión, no es ni más ni menos porque hay una persona que juega a diario con lo más importante que tenemos todos los humanos "LA VIDA" y que ésta, solo se vive una vez. Este hombre, no se conforma con grabar escenas normales a la que todos estamos acostumbrados a ver a las salidas de la Audiencia Nacional, porque según él,esto lo podría hacer cualquiera.

Con el trabajo que hace capturando imágenes tan arriesgadas y peligrosas consigue sentirse realizado.Primero,como persona, puesto que arriesga su vida para poder demostrar al mundo la oscura y cruel realidad de una guerra, y segundo, como buen profesional, tratando siempre llegar lo más cercano posible donde se encuentra la acción, bien sea debajo de un carro de combate o curando a un soldado a la vez que se está grabando.
A pesar del hombre fuerte que parece ser con este tipo de trabajo, que no todos somos capaces de hacer,demuestra ser una persona humana, sensible a cualquier detalle que se les ofrezca.